Nos presentábamos David y yo a una carrera nueva para ambos
en la que, ambos, buscábamos seguir mejorando nuestra velocidad punta para lo
que queda de temporada ser lo más competitivos posibles.
Llegamos bastante rápido al lugar de celebración de la
prueba(cuando dimos con el sitio aún estaban poniendo el arco de salida-meta) y
con algo de fresquito, retiramos dorsal y camiseta. La intención era, reconocer
el recorrido antes de afrontar los 4 kms de la prueba(finalmente fueron unos
cuantos metros menos)
Durante el calentamiento en la que hicimos casi 4 kms, no
había señalización cogimos parte del recorrido por ver unos conos en el suelo a
unos 400/500 metros de la salida pero poco más….
Acercándose la hora del comienzo de la prueba, ésta se
demoró unos 10-15 minutos(cosa que, particularmente, me altera bastante
llegando a ponerme a más de 130 ppm sin haber empezado) Antes de empezar, David
me comenta que había uno de nuestros rivales que tenía pinta de ser bueno a lo
que le digo: “vamos a machacar al barba” Se
da la salida y en los primeros metros, veo por delante a 4-5 atletas y no me
veo fluido de piernas(creo que esos nervios in-extremis me agarrotaron algo las
piernas) Conforme van avanzando los metros, veo que recupero las piernas y
empiezo a dar caza a corredores llegando al primer desvío en 2ª posición y por
los pasos, sé que vienen unos cuantos detrás de mí, no podía aflojar.
Procuro no mirar para atrás y me dedico a tirar lo más que
puedo para alejar a mis perseguidores con el objetivo de acercarme al que
marcha 1º lo máximo posible. Aproximadamente en torno al km 2, miro para atrás
porque oigo a alguien que se está acercando bastante a mí, cual es mi
sorpresa(y muy grata) que cuando miro para atrás el que me sigue es… ¡¡¡David!!!
El León de Varela, me alegro un montón y le doy ánimos para que siga así.
Siendo honestos, creo que llevaba piernas y ritmo suficientes para haberme
adelantado, aunque él diga que no 😉
Miro para atrás un par de veces y veo que estamos solos, le
vuelvo a dar ánimos para que siga y que nos llevemos el premio cosa que, afortunadamente,
así pasó. Me dio una alegría tremenda la carrera que realizó y que se llevara
un premio que venía mereciéndose desde hace tiempo, todo llega y, que sepas,
que no será el último.
Como aspectos negativos, siempre como crítica constructiva
para que años siguientes mejore la prueba y perdure, decir lo siguiente:
1º Descontrol en la entrega de premios no veo ni justo ni
lógico que, quedando tanto los de la carrera de 10 como los de 4 los
clasificados de la general, obtengan trofeos más pequeños que gente que ha
logrado premios por categorías. Como anécdota, negativa, a un corredor que
recortó incluso recorrido le dieron dos trofeos(uno por categoría y otro por la
general) Esas cosas no deben pasar cuando en el reglamento, figura otra cosa
bien diferente.
2º La señalización del recorrido. Hubo gente que luego nos
enteramos, que había hecho kilómetros de más porque los voluntarios(ellos no
tienen culpa, es culpa de los que organizan este evento) no estaban en los
puntos donde podía haber dudas en el recorrido.
3º Al reclamar el trofeo, cuando lo estaban dando delante
nuestra, nos dicen que el mío “está chapado en oro” y que era de más calidad que
alguno más grande, cosa que me molestó puesto que, repito, delante nuestra, los
estaban cambiando con algo más acorde a cada uno por su clasificación. Hubo,
las cosas como son, un miembro de la organización que amablemente nos lo cambió
de buena manera y sin problemas pero, lo de esa persona que nos quiso dar
coba(cosa que le dije) sobraba bajo mi punto de vista.
4º Haber hecho fotos de la carrera en algún punto o, al menos,
de los trofeos de los mayores…
Os dejo las pocas fotos que tenemos del evento donde pude
lucir mi camiseta Tri-caletera roja pero apenas se notó por la falta de fotos.
Espero que esta prueba mejore en esos aspectos porque tienen medios suficientes
y un entorno muy apetecible para la práctica
deportiva. Que así sea
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